Cuando la constante mejora en nuestra fabricación de carbono arroja resultados que apenas se parecen a los de hace pocos años, es hora de cambiar la manera en la que hablamos de carbono.
Con la introducción de OMX mostramos a riders de todo el mundo la dirección de nuestros cuadros de competición más ligeros y reactivos. OMX no es una fórmula secreta, es más contundente que eso: la cúspide en la fabricación de bicicletas de fibra de carbono.
MEJORA PERMANENTE
Un gran diseño y una construcción bien ejecutada produce cuadros con los que rodar es un placer. ¡Y nosotros lo hacemos! Pero también los cortamos, los pasamos por rayos X, los perforamos, los doblamos, los golpeamos, los aplastamos y los castigamos para mejorarlos todavía más.
Analizando nuestros cuadros con métodos patentados que van más allá de los estándares de la industria, obtenemos datos de incalculable valor que luego aplicamos en nuestro proceso de diseño.
Parte de este proceso discurre en el laboratorio y gran parte en la carretera o en la montaña. Ambos son cruciales para alcanzar la excelencia y clave para ofrecer la garantía de por vida.
EQUILIBRIO PERFECTO
La ligereza es buena. La integridad estructural, crítica. Crear el cuadro más ligero con una rigidez perfectamente ajustada es un objetivo a priori simple, pero es un proceso que requiere de años de expericiencia en diseño y fabricación.
Los cuadros OMX combinan fibras de carbono de alto módulo de hasta 588GPa con una resistencia a la tracción de 3800MPa que nos permiten ajustar perfectamente el peso y la rigidez de cada cuadro.
Los mejores materiales son siempre un punto de partida excelente; aplicarlos sobre diseños inteligentes con el talento de nuestros ingenieros convierten el resultado final en una creación realmente excepcional.
CONSTRUCCIÓN MAGISTRAL
Utilizamos las mejores láminas de carbono preimpregnado disponibles y las cortamos con láser a la medida específica de la talla de cada cuadro para minimizar el exceso de materiales y los solapamientos.
Realizamos un premoldeado específico que dura horas por cada cuadro de producción final antes del calentamiento y con ellos aseguramos la óptima compactación de la resina y la fibra con una mínima cantidad de carbono. El objetivo es una compresión suave y uniforme de los laminados; utilizamos moldes completos de poliestireno expandido (EPS), así como poliuretano e inserciones en látex para eliminar arrugas e imperfecciones cuando el cuadro es moldeado.