Para aquellos que no conozcáis Orbea, permitirme que os la presente. Orbea es una pequeña empresa, donde los propietarios somos todas las persona que trabajamos en ella, donde el trabajo de cada uno de nosotros importa más que el capital y donde las decisiones se comparten. Nuestro reto es devolver a la sociedad al menos aquello que nos aporta y la mejor manera que tenemos de hacerlo es generando riqueza. Para nosotros la máxima expresión de la riqueza es el empleo.
Nos gusta vernos, como un grupo de personas, que les gusta hacer bien su trabajo, y que en ocasiones somos capaces de hacer cosas excepcionales. ¡Y como disfrutamos cuando eso ocurre!
Hemos conseguido éxitos deportivos en todas las categorías de las diferentes disciplinas del ciclismo. Muchos nos conoceréis por haber celebrado las victorias conseguidas en las Olimpiadas, etapas del tour de Francia, Giro o Vuelta, Campeonatos del mundo de Cross Country, carreras de Ciclocross… o incluso el Ironman de Kona y Xterra en triatlón.
Con este tamaño, difícilmente podemos aspirar a sponsorizar grandes estrellas del deporte ya consagradas. Las nuestras, casi siempre son apuestas de futuro. Apuestas en deportistas que de alguna forma representan muchos de los valores en los que creemos… el esfuerzo, la determinación, la lucha y el inconformismo… pero que al igual que nosotros y fruto de su trabajo, en algunas ocasiones consiguen éxitos excepcionales.
Quizás el proyecto más significativo es el de la Fundación Euskadi con el mítico Euskaltel Euskadi marcando una época en el ciclismo de carretera. Cuando decidimos apoyar a aquél proyecto en 1994, que Roberto Laiseka alzara los brazos en 2001 en Luz Ardiden era impensable. Samuel Sánchez era por entonces un joven asturiano al que apoyábamos cuando Tomás Amezaga –mecánico del Equipo Euskaltel- lo acogió en su casa cuando competía en las filas del Olarra. Once años después, conquistó el Oro olímpico.
La Fundación Euskadi sólo ha sido la punta del iceberg; los 17 años del equipo del Orbea MTB Racing Team, los 10 años de colaboración con Andrew Starycowicz, los 9 años con el Luna Pro Team o el mítico Seat Orbea, Perico Delgado, Marino Lejarreta… también son un claro aval de nuestra filosofía de cantera.
Somos una empresa que en tres siglos de historia, ha vivido muchos aciertos y algunos errores. Hemos tenido la suerte de haber podido trabajar junto a muchos excelentes deportistas. La mayoría de las veces las relaciones han rebasado la barrera del patrocinio y han dado pie a relaciones personales. En nuestro 175 aniversario solo puedo agradecerles el esfuerzo, los éxitos que compartieron con nosotros, y especialmente el cariño que siempre nos han mostrado.
Hoy es el día en el que acudimos a competiciones y sentimos que un saludo que dedicamos a Perico, a Julien, a Haimar, a Samu, a Marino, a Egoi… son gestos sinceros, igual de sincera que la sonrisa que nos sale cuando les vemos obtener buenos resultados tanto en lo deportivo como en lo personal.