8 junio, 2017

Trans-Nomad 2017: la aventura endurera más nómada

Pedaladas a través de incomparables parajes, experiencias inolvidables, sensaciones nunca antes experimentadas, singletracks de ensueño,  desconocidos que la montaña convierte en inseparables… si todas esas características se unen en el Pirineo Aragonés a lo largo de cuatro días de septiembre, sólo podemos estar hablando de la Trans-Nomad: una carrera que, tras solo una edición, ya es considerada una de las diez mejores pruebas por etapas de enduro del mundo.

Una auténtica aventura de MTB por etapas reservada a una pequeña comunidad de 70 bikers con la que descubrir a fondo los rincones secretos del Valle de Benasque: 5.900m de desnivel positivo con remontes, porteos o rodaje sobre la propia bici y más de 7.000m negativos para desplegar todo el flow por senderos completamente naturales, cordilleras como la del Aneto, zonas de pradera o trialeras y, por supuesto, frondosos bosques de hayedos y pinares.

Una prueba con formato inédito que en este 2017 celebra su segunda edición entre los días 13 y 17 de septiembre -por climatología, el mes idóneo para una prueba de estas características- y a la que Orbea se suma como premium sponsor. Cuatro días y cuatro etapas de aventura donde luchar contra el crono, el terreno o la cambiante meteorología. Y también donde poner al límite las geometrías de las bicis más endureras.

Trazando A Vista

12 tramos cronometrados en un recorrido tan especial como mágico. Y es que los participantes de este desafío no conocerán los tracks de las etapas, sino que tendrán que trazar a vista cada desafío del terreno. En este sentido, Javier García González de Inizia Turismo, entidad organizadora del evento junto a Sherpa Project, lo tiene bien claro: “No queremos desvelarlos porque es algo que equilibra el nivel de los corredores. No hay posibilidad de entrenamiento antes y el corredor se enfrenta a un recorrido completamente natural donde demostrar su técnica sobre la bici”, señala el diseñador de los recorridos de la Trans-Nomad.

Para Markel Uriarte, corredor del Orbea Factory Team que ya participó en la primera edición de la Trans-Nomad, ésta es la forma más pura de MTB y su manera favorita de competir: “cuando vas a vista se demuestra que quien baja rápido es porque tiene técnica y no por haber pasado 50 veces por allí y conocerse todos los recovecos”. Para Markel, lo bonito es que “tienes que ir improvisando, a veces parece que te vas a colar y la gracia esta en ver cómo rectificas…”. Por ello, aconseja siempre “ir un punto por debajo de tu límite”.

La única novedad que podemos revelar del recorrido de este año es que una de sus cuatro jornadas transcurrirá por el Pirineo Francés. Cada etapa tendrá tres tramos cronometrados, con una distancia de entre 30 y 50 km, en los que los corredores tendrán que salvar unos 1500 metros de desnivel positivo. De esta forma, con enlaces y remontes, los aventureros invertirán unas 6-7 horas por jornada.

Aventura total, en familia

Si bien la Trans-Nomad es una prueba cronometrada, lo fundamental no está ahí (de hecho, no hay límite de tiempo para completar las etapas), sino en el espíritu de aventura y convivencia que se genera entre los participantes: vivir en un mismo campamento base, compartir trucos y consejos mientras se limpia la MTB para el día siguiente… hacer eso durante cuatro días genera vínculos especiales y duraderos.

“Si algo ha diferenciado a la Trans-Nomad de otro evento es la gran hermandad entre toda la familia de corredores, organización y demás”, confiesa Javier: “Los corredores se ayudaban  entre ellos, se esperaban, comían y cenaban juntos…esa es la filosofía que queremos promover: para competir hay muchas otras pruebas”, comenta Javier.

25 personas -12 de los cuales son Bike Patrols para que nadie se quede atrás…- trabajan en la organización de la Trans-Nomad: logística de materiales, transporte de los enseres de los bikers, montaje de los campamentos y tiendas individuales, avituallamientos, dirección de carrera, servicio de asistencia mecánica… todo para que los participantes de la Trans-Nomad sólo se tengan que ocupar de descansar tras la batalla.

El entorno es el rey

El propio Markel Uriarte confiesa cómo el recorrido y el entorno le dejó absolutamente prendado, motivo por el cual repetirá este año en la Trans-Nomad: “Mi etapa favorita del año pasado fue la primera, la de Sierra Negra: muy chula, con tramos muy completos y divertidos. Pero este año los recorridos serán completamente diferentes: Pirineos ofrece un montón de alternativas y al final será como participar por primera vez”.

Javier García coincide en destacar cómo la zona se está consolidando como uno de los destinos internacionales más bonitos para pedalear. “Intentamos buscar la diversidad del paisaje sobre todo en cotas altas, con collados muy cerca de zonas glaciares o paisajes de pradera y de bosque pirenaico. Una prueba como esta tiene que tener de todo… y lo tiene”.

¿Preparado para la aventura endurera más nómada?

Orbea estará presente en la Trans-Nomad con dos de sus embajadore: Markel Uriarte, del Orbea Factory Team, y César Gairín, residente en Whistler pero natural del Valle de Benasque. Ambos competirán con Rallon, la bicicleta más endurera de Orbea.

…¡ Y recuerda que puedes ganar una inscripción gratuita para Trans-Nomad!